La Policía Local de Calvià ha detenido este jueves 25 de septiembre a dos irlandeses por resistencia a la autoridad y un delito contra la seguridad vial en Santa Ponça tras una persecución.
Los hechos ocurrieron durante el turno de noche del miércoles día 24, concretamente 15 minutos después de la medianoche, cuando una patrulla en un servicio presencial a la entrada de Santa Ponça oyeron el ruido de un motor de vehículo que circulaba a gran velocidad hacia el interior del núcleo urbano. Al llegar a la rotonda de la Avda Rey Jaime I, el conductor del vehículo realizó un cambio brusco de dirección circulando en la misma por la parte izquierda, en sentido contrario al de la circulación, sin aminorar la marcha, con gran riesgo de colisión contra un autobús de transporte público TIB cuyo conductor se vió obligado a realizar una maniobra brusca de evasión hacia el margen de la calzada para evitar el impacto.
De inmediato los agentes procedieron a seguir al vehículo haciendo uso de los sistemas de emergencia luminosos y acústicos con la intención de que el conductor infractor parase el vehículo y al objeto de evitar posibles accidentes y/o atropellos dado lo concurrido de la vía, tanto de vehículos como de peatones, y la gran velocidad que mantenía.
Los policías le dieron alcance en el interior de un parking público, cuando se disponía el conductor a rectificar el sentido de la marcha tras colisionar con una barrera de acceso a otro parking privado de la zona, no sin antes verse obligado el conductor del coche patrulla a realizar varias maniobras bruscas de frenado y evasivas para evitar la colisión con el vehículo perseguido, que en todo momento intentaba cerrarle el paso y sacarlo de la vía.
Uno de los policías salió tras el conductor sospechoso que dejó el vehículo y huía a la carrera, mientras que el otro miembro de la patrulla se dirigió al vehículo donde había dos ocupantes que intentaban huir de la zona.
El policía que perseguía al conductor no consiguió darle alcance y volvió rápidamente en apoyo del compañero para poder reducir a los dos individuos que trataban por todos los medios de zafarse del otro policía, ofreciendo gran resistencia activa, lanzando manotazos y realizando giros bruscos del cuerpo para conseguir la huída.
Una vez reducidos y trasladados, detenidos, a las dependencias policiales accedieron de manera espontánea a identificarse, respondiendo a los nombres de B.J.K. y S.F., de origen irlandés, y facilitar datos sobre el conductor fugado, al que se le instruyen diligencias aparte de por un presunto delito contra la seguridad vial.
